sábado, 31 de diciembre de 2011
2011-2012
Este año que acaba trajo regalos escondidos, perlas ocultas en la mierda. En el camino me costó ver y entender cuáles eran. La vida nunca va a dejar de presentar obstáculos, situaciones, experiencias, vivencias que nos exigen no tanto revisar lo que está pasando, sino como reaccionamos nosotros ante ello. Si logramos hacerlo nos vamos a ver como personajes de una obra, donde el rol nuestro ya ha sido dictado por lo que hemos aprendido, y no por nuestra verdadera naturaleza, la cual es el cambio y aceptación. Entonces podemos actuar y no reaccionar. Ahí saldrá a la luz un regalo más, y quedamos preparados para el próximo. Cada segundo que vivimos estamos aprendiendo, porque no somos un proceso estático, la persona que fui ayer tuvo las semillas del que soy hoy, y así hasta el día que me muera. Entonces desde lo más profundo de mi ser que logro reconocer, deseo para este año 2012 que cada ser de este universo, cada planta, cada mineral, cada animal, cada persona humana, lo que conozco y lo que apenas imagino, tengamos oportunidad de desarrollo, de nutrición, de consciencia y de amor. Que los regalos del 2012 no vengan en envoltorio tan grosero y que sean aún más brillantes que los del 2011.
domingo, 4 de diciembre de 2011
La mosca
En las semanas más calientes del año, las moscas del vertedero Río Azul cruzaban la colina que le da nombre al barrio donde vivíamos con nuestros padres. La casa blanca de la esquina, la de las palmeras y flores, la rara hecha como de cubos, la moderna. Así identificaban la casa en el barrio, así la describíamos si alguien pedía la dirección . Esta casa fue diseñada para mis padres que venían del campo, de los bananales. Desde afuera no se ve ninguna ventana, por dentro cada habitación tiene patios internos, puertas y ventanas de piso a techo que los comunican. Una casa llena de luz, aire fresco y moscas de Río Azul cada cierto tiempo.
Victoria mi mamá era una mujer vanidosa, le gustaba lo bello, lo ordenado, esas estructuras le daban comodidad, seguridad, control; así ella sabía dónde estaba hasta el último tornillo que había comprado. No era religiosa y aún así bajo la consigna de ¨donde hay orden está dios¨, nos tenía en un régimen estricto de limpieza y cooperación en todas las tareas de la casa, limpiábamos pisos y paredes, barríamos, limpiábamos baños, lavábamos ropa, cortábamos el zacate y un sinfín más de tareas. Sostenía que su mandato era incuestionable porque ella era la Reina de la casa y ahí se hacía lo que ella quería. Era una madre inalcanzable, ella misma se subía a su trono, desde donde resplandecía con su belleza, su buen gusto, su humor, su fortaleza. Tenía mucho miedo mamá, su sensibilidad la abrumaba, no la comprendía, la identificaba más como una debilidad que como su verdadera esencia femenina y prefirió cambiarla a una fuerza de acción y de control. Su energía femenina estaba masculinizada y mamá era una mujer exitosa en todos los campos que veía.
La vanidad la acompañó hasta su muerte, una de sus bromas preferidas antes de morir era quejarse de haber sido la única paciente de cáncer en el mundo que en vez de enflaquecer engordaba.
Un día de verano las moscas revoloteaban por la casa, estábamos hartos de usar remedios, bolsas con agua, matamoscas. Tomé unas tijeras de cocina e intenté trozar alguna en el aire. Los dos pedazos de mosca cayeron a mis pies.
Esta enfermedad fue despiadada con ella, poco a poco la iba haciendo soltar cada reducto de control falso que ella creía tener, su soberbia iba descascarándose y al llegar al final de su vida mi madre lo único que podía y quería era dar amor y recibirlo.
La casa de La Colina, esa mosca partida en dos, mi madre y yo.
Victoria mi mamá era una mujer vanidosa, le gustaba lo bello, lo ordenado, esas estructuras le daban comodidad, seguridad, control; así ella sabía dónde estaba hasta el último tornillo que había comprado. No era religiosa y aún así bajo la consigna de ¨donde hay orden está dios¨, nos tenía en un régimen estricto de limpieza y cooperación en todas las tareas de la casa, limpiábamos pisos y paredes, barríamos, limpiábamos baños, lavábamos ropa, cortábamos el zacate y un sinfín más de tareas. Sostenía que su mandato era incuestionable porque ella era la Reina de la casa y ahí se hacía lo que ella quería. Era una madre inalcanzable, ella misma se subía a su trono, desde donde resplandecía con su belleza, su buen gusto, su humor, su fortaleza. Tenía mucho miedo mamá, su sensibilidad la abrumaba, no la comprendía, la identificaba más como una debilidad que como su verdadera esencia femenina y prefirió cambiarla a una fuerza de acción y de control. Su energía femenina estaba masculinizada y mamá era una mujer exitosa en todos los campos que veía.
La vanidad la acompañó hasta su muerte, una de sus bromas preferidas antes de morir era quejarse de haber sido la única paciente de cáncer en el mundo que en vez de enflaquecer engordaba.
Un día de verano las moscas revoloteaban por la casa, estábamos hartos de usar remedios, bolsas con agua, matamoscas. Tomé unas tijeras de cocina e intenté trozar alguna en el aire. Los dos pedazos de mosca cayeron a mis pies.
Esta enfermedad fue despiadada con ella, poco a poco la iba haciendo soltar cada reducto de control falso que ella creía tener, su soberbia iba descascarándose y al llegar al final de su vida mi madre lo único que podía y quería era dar amor y recibirlo.
La casa de La Colina, esa mosca partida en dos, mi madre y yo.
jueves, 1 de diciembre de 2011
NAVIDAD
El diablo se regocija
Con los aires navideños.
Su hermano Mister Claus
Lee en voz alta los pedidos inocentes.
Hemos sido buenos
Pagamos los impuestos,
vamos a misa,
Cerramos la casa de noche
Y de día cocinamos.
La menor está en el kinder
El mayor va para sexto
La pantalla, el trinchante,
la bici y la barbie
concédenos señor nuestro deseo
que el futuro es incierto.
La maquinaria de ese dios es poderosa
y antes de leer la carta
un millón de barbies
made in china
hacían fila en los estantes,
las billeteras hinchadas
con el salario trece
listas para caer en la trampa.
Por allá lejos un ser humano
Mira a otro en los ojos y se reconoce,
Feliz navidad parece que se dijeron.
Con los aires navideños.
Su hermano Mister Claus
Lee en voz alta los pedidos inocentes.
Hemos sido buenos
Pagamos los impuestos,
vamos a misa,
Cerramos la casa de noche
Y de día cocinamos.
La menor está en el kinder
El mayor va para sexto
La pantalla, el trinchante,
la bici y la barbie
concédenos señor nuestro deseo
que el futuro es incierto.
La maquinaria de ese dios es poderosa
y antes de leer la carta
un millón de barbies
made in china
hacían fila en los estantes,
las billeteras hinchadas
con el salario trece
listas para caer en la trampa.
Por allá lejos un ser humano
Mira a otro en los ojos y se reconoce,
Feliz navidad parece que se dijeron.
domingo, 27 de noviembre de 2011
TEOLOGIA
Siempre me costó creer en la maldad, como concepto o aún como acción concreta. Qué es la maldad? Es un producto de mi mente analítico relativista? o realmente existe una batalla primigenia entre el bien y el mal?.
Acciones que en un primer nivel catalogo de inmediato como malas (una persona que asesina a otra por ejemplo), se pueden entender simplemente como actos de humanos, cuyo nivel de desconexión con ellos mismos los lleva a un nivel así de violencia. Lo mismo podemos decir para cualquier acto, obra u omisión. Dada esta premisa podemos llegar a ver que el mal es el nivel de desconexión que tengamos en nuestros corazones. Si queremos entonces ir aún más profundo en la reflexión nos preguntamos, qué es lo que hace que nos desconectemos?. Claramente, la sociedad que hemos construido con sus sistemas inherentes es un reflejo de esta desconexión, y efectivamente ayuda y procura más desconexión, pero no es la causante. Pienso en el concepto del pecado original; es algo que traemos con nosotros, algo que tenemos que venir a limpiar en nuestro paso por la vida, por medio de la consciencia. La consciencia que nos permite recordar que somos uno mismo y que no existe separación, que no te puedo dañar sin dañarme a mí mismo y que tu beneficio es el mío. Lo que me lleva a extrapolar que el mundo material es lo que intrínsecamente trae el germén de la desconexión, es decir no existe posibilidad de ser materia y ser espíritu al mismo tiempo, al menos en una misma dimensión. Lo que nos separa del bien es la materia, eso es el mal. Cada partícula que da forma y peso a galaxias y humanos por igual existe por un pacto entre el bien y el mal, dios y el diablo, su alianza.
En el amor con que fue creado el universo venía incluido el mal, teníamos que estar desconectados para poder experimentar el proceso de autoconocimiento por medio de este cuerpo y entorno material, pero para lograrlo debíamos olvidar lo que somos, no debemos recordar porque sino ya no habría nada que aprender. Sólo de esa manera podemos regresar a él, al Dios verdadero, de la carne al espíritu de vuelta. Una explosión que regresa sobre sí misma, el universo se contrae. Volveremos a ser uno con Dios.
Acciones que en un primer nivel catalogo de inmediato como malas (una persona que asesina a otra por ejemplo), se pueden entender simplemente como actos de humanos, cuyo nivel de desconexión con ellos mismos los lleva a un nivel así de violencia. Lo mismo podemos decir para cualquier acto, obra u omisión. Dada esta premisa podemos llegar a ver que el mal es el nivel de desconexión que tengamos en nuestros corazones. Si queremos entonces ir aún más profundo en la reflexión nos preguntamos, qué es lo que hace que nos desconectemos?. Claramente, la sociedad que hemos construido con sus sistemas inherentes es un reflejo de esta desconexión, y efectivamente ayuda y procura más desconexión, pero no es la causante. Pienso en el concepto del pecado original; es algo que traemos con nosotros, algo que tenemos que venir a limpiar en nuestro paso por la vida, por medio de la consciencia. La consciencia que nos permite recordar que somos uno mismo y que no existe separación, que no te puedo dañar sin dañarme a mí mismo y que tu beneficio es el mío. Lo que me lleva a extrapolar que el mundo material es lo que intrínsecamente trae el germén de la desconexión, es decir no existe posibilidad de ser materia y ser espíritu al mismo tiempo, al menos en una misma dimensión. Lo que nos separa del bien es la materia, eso es el mal. Cada partícula que da forma y peso a galaxias y humanos por igual existe por un pacto entre el bien y el mal, dios y el diablo, su alianza.
En el amor con que fue creado el universo venía incluido el mal, teníamos que estar desconectados para poder experimentar el proceso de autoconocimiento por medio de este cuerpo y entorno material, pero para lograrlo debíamos olvidar lo que somos, no debemos recordar porque sino ya no habría nada que aprender. Sólo de esa manera podemos regresar a él, al Dios verdadero, de la carne al espíritu de vuelta. Una explosión que regresa sobre sí misma, el universo se contrae. Volveremos a ser uno con Dios.
viernes, 28 de octubre de 2011
LOVE CHAT
Paula: We are flying pancakes
Eric: you are flying circles
I am flying squares.
Paula: Yes,
and we triangle when we meet.
Eric: you are flying circles
I am flying squares.
Paula: Yes,
and we triangle when we meet.
sábado, 22 de octubre de 2011
EL JARDINERO
Sacudo un brazo
Flores se revelan,
Muevo el otro
Se ven flores
Pero podridas.
En el encuentro de ambas
Está mi huerto eterno;
Jardinero y testigo.
Flores se revelan,
Muevo el otro
Se ven flores
Pero podridas.
En el encuentro de ambas
Está mi huerto eterno;
Jardinero y testigo.
miércoles, 5 de octubre de 2011
41
Con la certeza de los números
La Embriaguez de las palabras
Y la delicia en las formas
He jugado
41 vueltas a la estrella.
Un enigma
Dentro de un acertijo
Envuelto en una nube de misterio
La Embriaguez de las palabras
Y la delicia en las formas
He jugado
41 vueltas a la estrella.
Un enigma
Dentro de un acertijo
Envuelto en una nube de misterio
martes, 20 de septiembre de 2011
CARIBE
Ir al Caribe de mi país inevitablemente me lleva a un Caribe más profundo, aquel que resiste en la memoria. Ahí habita un niño con preguntas y pocas respuestas, su mirar le permite ver el mundo con toda su belleza y toda su mentira.
Al lado de la casa hay plantas de esas con hojas como lanzas agresivas. El lugar es ideal para que las arañas hilo de oro construyan su tela. Cada mañana la hembra reconstruye lo que se haya dañado por la noche (por la lluvia, el viento, etc). Teje los elementos radiales, después se tejen los circulares, cuando ha terminado de tejer, vuelve y completa los boquetes.
El niño observa las arañas con deleite, pasa horas mirando sus más ligeros movimientos, la madre es ajena al interés del niño. Pasa sus piecitos desnudos por el zacate siempre impecable, decenas de saltamontes de colores brincan alocados y alguno le queda atrapado en las manos. La fuerza de las patas traseras del saltamontes es increíble, lucha por soltarse y algunas veces lo logra, el sonido del chasqueo de sus patas contra los dedos es claro aún. El niño da vueltas por las plantas decidiendo cuál araña será alimentada. En el momento que el grillo toca la tela la vibración alerta a la depredadora, en segundos la presa está bailando como un trompo entre las patas delanteras y con una pata trasera empieza a envolverla con su seda. No se ve nada del saltamontes, es como una pequeña momia y es en ese momento cuando es mordida. El veneno licúa las entrañas del insecto y está listo para ser sorbido. Algunas veces lo chupa de inmediato, otras veces lo cuelga de la parte más alta de su red.
En la playa Caribeña el mar vive en pugna con la selva, dos titanes que quieren la supremacía de la vida. Enredaderas cruzan la arena y la llenan de guirnaldas de flores, brazos de ríos ahora son esteros salados de tanto inmiscuir sus aguas. En esas flores habitan saltamontes de arena, tuve uno en mis dedos, de miedo sueltan por la boca una baba color herrumbre, me miraba con sus ojos espejos y yo estaba tentado de dárselo como ofrenda a la araña más cercana. Brincó de mi mano y nunca miró atrás.
Las arañas jóvenes no pueden quedarse en el espacio de sus madres. Se aproximan al borde de una superficie elevada, levantan la cola y sueltan su seda. Cuando los hilos alcanzan cierta longitud el viento se las lleva, así en parapente empiezan su recorrido por la vida, confiando en la infinita bondad del universo, dejándose ir con todo su amor al vacío, a lo desconocido. Unas logran llegar a un sitio adecuado. Muchas morirán.
Viene la lluvia, su madre le da permiso de jugar con sus hermanos bajo esa furia tropical. En minutos las laderas del jardín se convierten en toboganes de agua, el niño ríe y disfruta el contacto con la felicidad.
La carretera del Zurquí, la de la muerte según los periodistas. Manejo con cuidado, hay lluvia y neblina. Minutos después de que hayamos pasado la noticia llega del auto aplastado por un derrumbe.
Quiero ser como esas arañas, dejarme llevar y flotar por el universo, que los vientos de la vida me lleven calmo al encuentro con mi propósito, todo yo apertura, todo yo aceptación.
viernes, 26 de agosto de 2011
ETERNIDAD
Una vez que el ser humano se da cuenta que es eterno y con un futuro eterno, que la muerte no existe porque nuestros cuerpos están hechos de energía -ya que la ley de termodinámica plantea que la energía no puede ser creada ni destruida-; cuando esto se comprende a niveles profundos, todas las inseguridades y sentimientos negativos empiezan a desvanecerse y el deseo que aflora es el de recordarle a los demás esto, de transmitir esta consciencia que es amor y eternidad.
El propósito de nuestro existir es sólo estar y experimentar lo que es estar vivo, o sea no tener propósito. Esto nos pone en tono con la naturaleza, con su manera de operar.
El universo entero es consciencia, por lo tanto no lo podemos percibir directamente, solamente experimentamos nuestra consciencia de él. Entonces si miramos las circunstancias que nos envuelven, la gente que frecuentamos, el entorno en que estamos, podemos mirar el universo que está dentro de nosotros mismos desde esos miles de espejos cotidianos; de esta manera nuestra experiencia en el mundo físico nos revela las profundidades de nuestro existir, dándonos la oportunidad de crecer y amarnos por el ser infinito que somos.
El propósito de nuestro existir es sólo estar y experimentar lo que es estar vivo, o sea no tener propósito. Esto nos pone en tono con la naturaleza, con su manera de operar.
El universo entero es consciencia, por lo tanto no lo podemos percibir directamente, solamente experimentamos nuestra consciencia de él. Entonces si miramos las circunstancias que nos envuelven, la gente que frecuentamos, el entorno en que estamos, podemos mirar el universo que está dentro de nosotros mismos desde esos miles de espejos cotidianos; de esta manera nuestra experiencia en el mundo físico nos revela las profundidades de nuestro existir, dándonos la oportunidad de crecer y amarnos por el ser infinito que somos.
lunes, 22 de agosto de 2011
PARA UNA MAESTRA
Buscando el significado de su existencia
Un santo cruza la noche oscura del alma
La humildad de su Ser hace acto de presencia
Abraza sus límites, sus miedos e impotencia
Ese umbral oscuro es ahora puerta dorada
y al fin se encuentra
en silencio,
desnudo,
inmortal.
Un santo cruza la noche oscura del alma
La humildad de su Ser hace acto de presencia
Abraza sus límites, sus miedos e impotencia
Ese umbral oscuro es ahora puerta dorada
y al fin se encuentra
en silencio,
desnudo,
inmortal.
miércoles, 10 de agosto de 2011
ZEN
La paz detrás de las palabras
encima de los juicios.
Cerrar los ojos
Sentir el cuerpo,
Abrir los ojos
Admirar lo físico,
Todos los caminos fluyen.
El Amor es nuestra única casa.
encima de los juicios.
Cerrar los ojos
Sentir el cuerpo,
Abrir los ojos
Admirar lo físico,
Todos los caminos fluyen.
El Amor es nuestra única casa.
domingo, 7 de agosto de 2011
MIS CHIQUITOS. MAYO 98
EL NINO
El niño de las pestañas tomó un taxi. El chofer le dijo. Dónde vas tan pequeño y tan solo? El niño no supo responder y rompió a llorar.
LA NINA
La niña de las palabras se puso su mejor vestido. Salió de su casa con un cartel en la mano, lo plantó en el césped y se sentó a su lado. El cartel decía “cambio palabras por sonrisas”.
LA NINA
Tras hacer la cama y sacar el perro al parque, la niña de las palabras se sentó en la sala dispuesta a quebrar el chanchito con sus ahorros. Miraba al animalito en los ojos y le decía con cariño: por lo menos vos sí sabes lo que valen tus entrañas.
EL NINO
Después de tres días sin comer, el niño de las pestañas trató de abrir su estómago. Su madre le daba caldos de huesos, sopas de corazones y el pobre los regurgitaba. No alcanzaba a entender porqué si necesitaba el alimento, su pequeño cuerpo lo devolvía como un veneno.
LA NINA
La niña sonríe con sus manos limpias, no conoce otra forma. Fue exactamente ayer cuando creyó que el mal no existía. Se abrazó a su almohada y se sintió expulsada del paraíso.
LA NINA
Sin saberlo la niña de las palabras le dio nombre a las cosas, el autobús era un lleva tristezas, el lapicero su cajita mágica, su pasado se llamaba cobija y el futuro era una espada; pero su preferido eran los zapatos, estos eran canciones que ella calzaba, transformando su cuerpo en miles de notas que quizás alguien iba alguna vez a escuchar.
EL NIÑO
El niño de las pestañas juega en su columpio, observa los charcos, la gente, el perro. Se habla a sí mismo e imagina sus palabras lazos de colores entre él y el mundo. Una pelota rueda a sus pies y el niño la patea. Locomotora, cohete, huracán salen de su boca y el instante es mágico.
El niño de las pestañas tomó un taxi. El chofer le dijo. Dónde vas tan pequeño y tan solo? El niño no supo responder y rompió a llorar.
LA NINA
La niña de las palabras se puso su mejor vestido. Salió de su casa con un cartel en la mano, lo plantó en el césped y se sentó a su lado. El cartel decía “cambio palabras por sonrisas”.
LA NINA
Tras hacer la cama y sacar el perro al parque, la niña de las palabras se sentó en la sala dispuesta a quebrar el chanchito con sus ahorros. Miraba al animalito en los ojos y le decía con cariño: por lo menos vos sí sabes lo que valen tus entrañas.
EL NINO
Después de tres días sin comer, el niño de las pestañas trató de abrir su estómago. Su madre le daba caldos de huesos, sopas de corazones y el pobre los regurgitaba. No alcanzaba a entender porqué si necesitaba el alimento, su pequeño cuerpo lo devolvía como un veneno.
LA NINA
La niña sonríe con sus manos limpias, no conoce otra forma. Fue exactamente ayer cuando creyó que el mal no existía. Se abrazó a su almohada y se sintió expulsada del paraíso.
LA NINA
Sin saberlo la niña de las palabras le dio nombre a las cosas, el autobús era un lleva tristezas, el lapicero su cajita mágica, su pasado se llamaba cobija y el futuro era una espada; pero su preferido eran los zapatos, estos eran canciones que ella calzaba, transformando su cuerpo en miles de notas que quizás alguien iba alguna vez a escuchar.
EL NIÑO
El niño de las pestañas juega en su columpio, observa los charcos, la gente, el perro. Se habla a sí mismo e imagina sus palabras lazos de colores entre él y el mundo. Una pelota rueda a sus pies y el niño la patea. Locomotora, cohete, huracán salen de su boca y el instante es mágico.
lunes, 1 de agosto de 2011
PARADOJA
Todo y nada, lo visto y lo no visto, lo más sagrado y lo prescindible, lo visible y lo invisible. Esa puede ser una definición de ser humano. Si pensamos eso nos damos cuenta que absolutamente nada tiene importancia, y al mismo tiempo ese mismo todo tiene la más absoluta y sagrada existencia. Esa paradoja nos obliga a preguntarnos sobre lo bueno y lo malo. ¿ qué es uno y qué lo otro?
Todo lo que sea consciencia es lo bueno, y lo carente de ella es lo malo. Ninguna acción es mala o buena. El amor puede ser ambas, se ha matado en nombre de amor por la religión, se ha curado enfermos en nombre de él. Cualquier otra expresión tampoco puede definirse como buena o mala, dada alguna circunstancia la violencia puede ser vista como el actuar correcto. Lo que hace entonces la diferencia es la consciencia. Estar enojado consciente de ello es correcto, estar amando sin consciencia es malo. Entonces llevar consciencia a nuestro vivir es lo justo.
Permitamos entonces que la consciencia entre a todos nuestros actos, a nuestros pensamientos, a nuestros sueños. Que esta calidad entre cada vez más en nosotros. Entonces todo lo que hagamos será bueno.
Nuestros actos tienen la capacidad de ser una bendición para nosotros y para los demás. Para llegar a ello lo que es necesario cambiar en el ser humano, es la consciencia que tiene sobre sí mismo.
Crecemos saliendo de la cabeza y entrando en el corazón.
Todo lo que sea consciencia es lo bueno, y lo carente de ella es lo malo. Ninguna acción es mala o buena. El amor puede ser ambas, se ha matado en nombre de amor por la religión, se ha curado enfermos en nombre de él. Cualquier otra expresión tampoco puede definirse como buena o mala, dada alguna circunstancia la violencia puede ser vista como el actuar correcto. Lo que hace entonces la diferencia es la consciencia. Estar enojado consciente de ello es correcto, estar amando sin consciencia es malo. Entonces llevar consciencia a nuestro vivir es lo justo.
Permitamos entonces que la consciencia entre a todos nuestros actos, a nuestros pensamientos, a nuestros sueños. Que esta calidad entre cada vez más en nosotros. Entonces todo lo que hagamos será bueno.
Nuestros actos tienen la capacidad de ser una bendición para nosotros y para los demás. Para llegar a ello lo que es necesario cambiar en el ser humano, es la consciencia que tiene sobre sí mismo.
Crecemos saliendo de la cabeza y entrando en el corazón.
sábado, 16 de julio de 2011
VICTORIA`S SECRET
Mi madre falleció ayer en la madrugada, después de 6 años de pelea contra ese cáncer, que era pelea contra ella misma.
Siento que al final de su proceso ella logró soltar controles, ataduras, cerramientos y miedos a lo interno; que en su vida le habían impedido ver su valía asombrosa, su verdadero ser hermoso y sin reservas. Es por eso que todo este dolor que ella vivió y que por ende nosotros en la familia compartimos, es algo para estar agradecido. Mi corazón está más abierto, receptivo y resplandeciente que nunca.
El dolor que tengo es así de grande -así de sombra así de luz, arriba como abajo, adentro como afuera-.
Descansa en paz mamá, nunca estuvimos separados. Todo era una ilusión.
Siento que al final de su proceso ella logró soltar controles, ataduras, cerramientos y miedos a lo interno; que en su vida le habían impedido ver su valía asombrosa, su verdadero ser hermoso y sin reservas. Es por eso que todo este dolor que ella vivió y que por ende nosotros en la familia compartimos, es algo para estar agradecido. Mi corazón está más abierto, receptivo y resplandeciente que nunca.
El dolor que tengo es así de grande -así de sombra así de luz, arriba como abajo, adentro como afuera-.
Descansa en paz mamá, nunca estuvimos separados. Todo era una ilusión.
jueves, 16 de junio de 2011
TRABALENGUAS
Estoy muy newagesiado ¿Quién me desennewagesiará? El desennewagesiador que me desennewagesee, buen desennewagesiador será.
martes, 7 de junio de 2011
Illuminado o enamorado?
Para algunos el estado de iluminación espiritual es como una especie de proeza mágica, un estado de casi perfección en el cual se pueden hacer cosas asombrosas, leer mentes, saber el pasado y el futuro, estar en tono con las energìas del universo y desde ahí ser un superhombre feliz y ayudador. Esto puede ser cierto para algunos seres en especial, pero para nosotros la iluminación tiene mucho màs que ver con un estado nuevo de frescura y simpleza ante las cosas. Serìa entonces como una cualidad con la que le logramos dar al universo una pàtina de novedad. Una mirada de principiante.
Tener mente de principiante no es tarea menuda. En cierta manera el proceso de la iluminación es limpiar los pensamientos, creencias e ideas que obnubilan nuestra capacidad de ver las cosas como son en su forma prístina. Tambièn, la mente de principiante no permite ser contaminada ni por el pasado ni por el futuro, cada momento es saboreado por su propio peso, no el que le damos con nuestra experiencia de vida, con nuestro cùmulo de cultura. Esto es cierto aùn en medio de las emociones màs extremas, ya sea enojo, dolor, desesperación, hasta el éxtasis; si se actùa influenciado por ellas no podemos acceder a la claridad del momento. Estos sentimientos están acà para ser experimentados, pero la acción o reacción debe venir de aquello que està debajo de todos los sentimientos. En el núcleo de la materia, en el corazón de todas las emociones, no importa cuàn horrendas o sabrosas, hay paz.
Desde esa paz podemos vivir la expansión de la iluminación, no porque no nos importe lo que sucede en el entorno, no es algo nihilista, sino porque amamos de tal manera que aceptamos todo como es y tomamos responsabilidad por nuestros actos y pensamientos co-creadores de la realidad.
Hasta la palabra amor puede ser contaminada sino se està en el momento de sabiduría del presente. Por eso es mejor ni siquiera hablar de todo esto que repito. Simplemente abramos los corazones y dejemos que el amor hable por sì solo.
Paciencia, compasiòn, alegrìa.
Tener mente de principiante no es tarea menuda. En cierta manera el proceso de la iluminación es limpiar los pensamientos, creencias e ideas que obnubilan nuestra capacidad de ver las cosas como son en su forma prístina. Tambièn, la mente de principiante no permite ser contaminada ni por el pasado ni por el futuro, cada momento es saboreado por su propio peso, no el que le damos con nuestra experiencia de vida, con nuestro cùmulo de cultura. Esto es cierto aùn en medio de las emociones màs extremas, ya sea enojo, dolor, desesperación, hasta el éxtasis; si se actùa influenciado por ellas no podemos acceder a la claridad del momento. Estos sentimientos están acà para ser experimentados, pero la acción o reacción debe venir de aquello que està debajo de todos los sentimientos. En el núcleo de la materia, en el corazón de todas las emociones, no importa cuàn horrendas o sabrosas, hay paz.
Desde esa paz podemos vivir la expansión de la iluminación, no porque no nos importe lo que sucede en el entorno, no es algo nihilista, sino porque amamos de tal manera que aceptamos todo como es y tomamos responsabilidad por nuestros actos y pensamientos co-creadores de la realidad.
Hasta la palabra amor puede ser contaminada sino se està en el momento de sabiduría del presente. Por eso es mejor ni siquiera hablar de todo esto que repito. Simplemente abramos los corazones y dejemos que el amor hable por sì solo.
Paciencia, compasiòn, alegrìa.
martes, 10 de mayo de 2011
APERTURAS
El amor puede ser confundido por una emoción, cuando en verdad es un estado de
consciencia, una manera de estar y de ser en el mundo, un modo de verse a sì mismo y
a los otros. En este momento, y en todos los momentos presentes que nos toca vivir,
estamos cerràndonos o abriéndonos. O estamos esperando algo (màs dinero, màs seguridad, afecto, cariño) o estamos viviendo desde la profundidad de nuestro corazón, abriéndonos igual que el momento lo hace con nosotros, dando lo que màs profundamente anhelamos dar, sin demora alguna.
consciencia, una manera de estar y de ser en el mundo, un modo de verse a sì mismo y
a los otros. En este momento, y en todos los momentos presentes que nos toca vivir,
estamos cerràndonos o abriéndonos. O estamos esperando algo (màs dinero, màs seguridad, afecto, cariño) o estamos viviendo desde la profundidad de nuestro corazón, abriéndonos igual que el momento lo hace con nosotros, dando lo que màs profundamente anhelamos dar, sin demora alguna.
jueves, 28 de abril de 2011
ABC
La manera más efectiva y segura para ayudar a los demàs es ocuparse en mejorarse a sí mismo. Educarse, conocerse, observarse, desapegarse, hacerse experto en llevar esa consciencia a otros que estén interesados. Es mucho más importante tratar de acumular y alimentar el potencial que cada uno de nosotros trae en vez de tratar de hacer bien a lo loco. Las oportunidades para “hacer algo” pasan cuando llegan –alguna idea nos ilumina y coincidentemente nuestra situación personal se presta para que se pueda llevar a cabo. Mientras tanto, prepárese.
Mejorarse a sí mismo implica más estabilidad mental y un mejor balance emocional, ir adquiriendo sabiduría por medio de la observación y de la experiencia, teniendo en cuenta el nivel de entendimiento de los demás a la hora de tratar con ellos.
Educarse a sí mismo significa aprender más acerca de lo que verdaderamente importa, lo que realmente pasa en el mundo y dentro de uno mismo, las cosas ocultas que nos manipulan y que podrían ser evitadas si solamente las supiéramos, los principios positivos que si se saben y se aplican, nos permitirían de manera compasiva progresar inteligente y poderosamente por la vida.
Mejorarse a sí mismo implica más estabilidad mental y un mejor balance emocional, ir adquiriendo sabiduría por medio de la observación y de la experiencia, teniendo en cuenta el nivel de entendimiento de los demás a la hora de tratar con ellos.
Educarse a sí mismo significa aprender más acerca de lo que verdaderamente importa, lo que realmente pasa en el mundo y dentro de uno mismo, las cosas ocultas que nos manipulan y que podrían ser evitadas si solamente las supiéramos, los principios positivos que si se saben y se aplican, nos permitirían de manera compasiva progresar inteligente y poderosamente por la vida.
sábado, 26 de marzo de 2011
DIOS Y FREUD
El instante que se va,
La alegría del devenir;
Dios es esa estatua.
Muda y quieta por eones,
Dueña de la totalidad
Y ajena a sì misma.
Perfecta porque no hay nada
Fuera de ella.
Dios està atrapado
en ese castillo infinito
Que es èl mismo.
Siempre estàtico;
Porque todo ocurre dentro de sus confines.
Nacemos los humanos
Con la chispa de su simiente
Y con capacidad de reconocernos.
Somos dios caminando en la tierra.
Pero lo olvidamos en las palabras.
Cada momento que nos maravillamos ante lo bello,
Que sentimos nuestro cuerpo vivo y atento;
El Dios infinito se expande.
Porque lo mismo
hace nuestra consciencia.
La única tarea es adorarle,
Buscarlo siempre
en el momento eterno;
Recordando que el tiempo
no existe.
Asì como no existe
un metro
o un vatio.
Lo bueno y lo malo
nacen en tu mente;
para Dios es todo
un haber sin matices.
Estamos acà para que el Padre
viva a travès del Hijo.
Somos un evento freudiano.
La alegría del devenir;
Dios es esa estatua.
Muda y quieta por eones,
Dueña de la totalidad
Y ajena a sì misma.
Perfecta porque no hay nada
Fuera de ella.
Dios està atrapado
en ese castillo infinito
Que es èl mismo.
Siempre estàtico;
Porque todo ocurre dentro de sus confines.
Nacemos los humanos
Con la chispa de su simiente
Y con capacidad de reconocernos.
Somos dios caminando en la tierra.
Pero lo olvidamos en las palabras.
Cada momento que nos maravillamos ante lo bello,
Que sentimos nuestro cuerpo vivo y atento;
El Dios infinito se expande.
Porque lo mismo
hace nuestra consciencia.
La única tarea es adorarle,
Buscarlo siempre
en el momento eterno;
Recordando que el tiempo
no existe.
Asì como no existe
un metro
o un vatio.
Lo bueno y lo malo
nacen en tu mente;
para Dios es todo
un haber sin matices.
Estamos acà para que el Padre
viva a travès del Hijo.
Somos un evento freudiano.
viernes, 25 de marzo de 2011
KEROUAC A LA UNA
I have lots of things to teach you now,
in case we ever meet,
concerning the message that was transmitted to me
under a pine tree in North Carolina
on a cold winter moonlit night.
It said that Nothing Ever Happened, so don’t worry.
It’s all like a dream.
Everything is ecstasy, inside.
We just don’t know it because of our thinking-minds.
But in our true blissful essence of mind is known
that everything is alright forever and forever and forever.
Close your eyes,
let your hands and nerve-ends drop,
stop breathing for 3 seconds,
listen to the silence inside the illusion of the world,
and you will remember the lesson you forgot,
which was taught in immense milky ways
of cloudy innumerable worlds
long ago and not even at all.
It is all one vast awakened thing.
I call it the golden eternity.
It is perfect.
We were never really born,
we will never really die.
It has nothing to do with the imaginary idea
of a personal self,
other selves,
many selves everywhere,
or one universal self.
Self is only an idea, a mortal idea.
That which passes through everything, is one thing.
It’s a dream already ended.
There’s nothing from staring at mountains months on end.
They never show any expression,
they are like empty space.
Do you think the emptiness of space will ever crumble away.
Mountains will crumble, but the emptiness of space,
which is the one universal essence of mind,
the one vast awakenerhood,
empty and awake,
will never crumble away because it was never born.
The world you see is just a movie in your mind.
—Jack Kerouac, to his ex-wife
in case we ever meet,
concerning the message that was transmitted to me
under a pine tree in North Carolina
on a cold winter moonlit night.
It said that Nothing Ever Happened, so don’t worry.
It’s all like a dream.
Everything is ecstasy, inside.
We just don’t know it because of our thinking-minds.
But in our true blissful essence of mind is known
that everything is alright forever and forever and forever.
Close your eyes,
let your hands and nerve-ends drop,
stop breathing for 3 seconds,
listen to the silence inside the illusion of the world,
and you will remember the lesson you forgot,
which was taught in immense milky ways
of cloudy innumerable worlds
long ago and not even at all.
It is all one vast awakened thing.
I call it the golden eternity.
It is perfect.
We were never really born,
we will never really die.
It has nothing to do with the imaginary idea
of a personal self,
other selves,
many selves everywhere,
or one universal self.
Self is only an idea, a mortal idea.
That which passes through everything, is one thing.
It’s a dream already ended.
There’s nothing from staring at mountains months on end.
They never show any expression,
they are like empty space.
Do you think the emptiness of space will ever crumble away.
Mountains will crumble, but the emptiness of space,
which is the one universal essence of mind,
the one vast awakenerhood,
empty and awake,
will never crumble away because it was never born.
The world you see is just a movie in your mind.
—Jack Kerouac, to his ex-wife
martes, 1 de marzo de 2011
jueves, 17 de febrero de 2011
MANTRA RAYA
Soy ese que se muestra
Ya no màs el que era
En el juego estuve perdido
Te daba lo que querìas
Si conseguía lo que anhelaba
Espejos por todo lado
Y siempre los mismos reflejos
No podía verlos de otra forma
Estaba ciego a mì mismo
Mi Carne corrupta
la mente podrida
el espíritu preso
Ahora que llevo
el corazón en la mano
Resigno de las formas conocidas
De los aprendizajes y de los esquemas
Entrego las sutilezas
Y acepto la contundencia
me doy a la corriente de la vida
Desnudo
Abierto
Imperfecto
Humano.
Ya no màs el que era
En el juego estuve perdido
Te daba lo que querìas
Si conseguía lo que anhelaba
Espejos por todo lado
Y siempre los mismos reflejos
No podía verlos de otra forma
Estaba ciego a mì mismo
Mi Carne corrupta
la mente podrida
el espíritu preso
Ahora que llevo
el corazón en la mano
Resigno de las formas conocidas
De los aprendizajes y de los esquemas
Entrego las sutilezas
Y acepto la contundencia
me doy a la corriente de la vida
Desnudo
Abierto
Imperfecto
Humano.
viernes, 14 de enero de 2011
CABITO Y EL TAMAL
Me acabo de comer un tamal. Hecho en la casa de mi madre, de la manera que los han hecho siempre. Sin embargo este tamal no me supo a tamal. Cuando lo probè la ausencia de Cabito me entrò por la boca.
Lo vi en su cocina. Lo vi amando cada instante que la tamaleada le regalaba. Moler maíz, hacer chicharrones, cocinar la carne, y el que màs amaba: darle sabor a la masa. Todo esto derrochando amor y alegría, siempre con sonrisa y optimismo, con ganas de que nos comiéramos un pedazo de su corazón.
Veo a Mamà peleando con èl por la cantidad de asiento de chicharròn que le pone a la masa, veo como al descuido de ella le pone lo que le querìa poner y me hace su cómplice. Veo como armamos los tamales y a Papà haciendo castillos en el aire con sus negocios de fàbula, o con sus historias increíbles que me cautivaban. El viviò una vida en libertad, con su corazón abierto y su niño interno en los hombros. El era un contador de cuentos, un trovador, un gaucho y un bromista.
Todo esto me viene a la mente por un sabor que no encuentro.
Miro un croquis de una lengua, cada pedazo reconoce un sabor, al centro salado y àcido, detrás amargo, adelante dulce. Con esos cuatro sabores es posible crear belleza que es el lenguaje del amor.
El dia que murió, una hermana de èl me abrazo, me mirò a los ojos y me dijo -Eric, se nos murió La Poesía- . No le pude contestar nada, ahora lo hago. Sì tìa, murió y era mi Papà y un Tamal.
Lo vi en su cocina. Lo vi amando cada instante que la tamaleada le regalaba. Moler maíz, hacer chicharrones, cocinar la carne, y el que màs amaba: darle sabor a la masa. Todo esto derrochando amor y alegría, siempre con sonrisa y optimismo, con ganas de que nos comiéramos un pedazo de su corazón.
Veo a Mamà peleando con èl por la cantidad de asiento de chicharròn que le pone a la masa, veo como al descuido de ella le pone lo que le querìa poner y me hace su cómplice. Veo como armamos los tamales y a Papà haciendo castillos en el aire con sus negocios de fàbula, o con sus historias increíbles que me cautivaban. El viviò una vida en libertad, con su corazón abierto y su niño interno en los hombros. El era un contador de cuentos, un trovador, un gaucho y un bromista.
Todo esto me viene a la mente por un sabor que no encuentro.
Miro un croquis de una lengua, cada pedazo reconoce un sabor, al centro salado y àcido, detrás amargo, adelante dulce. Con esos cuatro sabores es posible crear belleza que es el lenguaje del amor.
El dia que murió, una hermana de èl me abrazo, me mirò a los ojos y me dijo -Eric, se nos murió La Poesía- . No le pude contestar nada, ahora lo hago. Sì tìa, murió y era mi Papà y un Tamal.
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